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El humor en la publicidad, acercándose de una manera real al consumidor

La publicidad ha evolucionado significativamente, y una de las estrategias más efectivas que ha surgido es el uso del humor. Incorporar el humor en los anuncios y campañas publicitarias no solo hace que el mensaje sea más atractivo, sino que también ayuda a construir una conexión emocional con el consumidor. 


Así el humor se ha convertido en una herramienta clave en el marketing. Según un informe de Oracle, el 90% de los consumidores recuerdan con mayor precisión aquellas marcas o productos directamente relacionados con anuncios de corte humorístico, y el 72% elige  aquellas marcas que recurren al humor en su publicidad por encima de sus rivales más directos. Otro dato clave es que  el 80% de los consumidores están más predispuestos a comprar de nuevo un producto o un servicio si la marca que está detrás recurre a una estrategia que incluya un componente de humor.


Otra de las muestras destacadas que hacen del humor una ficha por excelencia en la estrategia de los contenidos para consumidores, está en la reciente edición de Cannes Lions, donde algunas de las campañas premiadas  incluyeron el humor como parte de su receta creativa. Lo mismo hicieron algunas pausas publicitarias en el Súper Bowl, acudieron al sentido del humor para atraer a las audiencias. 


Algunas de las ventajas de emplear el humor dentro de las campañas publicitarias, está por un lado,  ayuda a capturar la atención de los consumidores e incentiva un mayor interés por un servicio o producto. También, crea una conexión emocional. El humor tiene el poder de crear vínculos emocionales, crear recuerdos y acudir a emociones que pueden afianzar la lealtad hacia la marca. Pues un anuncio que provoca una risa puede hacer que el consumidor se sienta bien y, por ende, más predispuesto a relacionarse con la marca.


Otro de los aspectos a tener en cuenta es que el humor apoya al recordación de marca y la asociación con elementos positivos alusivos al mensaje de la marca. Sin embargo, hay que tener presente el elemento cultural y el contexto en el que se desarrolla una pieza o un contenido con un toque de humor, pues el humor puede ser subjetivo y culturalmente específico. 


Las marcas deben tener en cuenta que lo que es gracioso en un país puede no resonar de la misma manera en otro. de allí que deben ser cuidadosas al elegir el tipo de humor que utilizan en las piezas publicitarias y asegurarse de que su mensaje sea apropiado y no ofenda a ningún grupo.


En pocas palabras, el humor en la publicidad es una herramienta poderosa que, cuando se utiliza de manera efectiva, puede crear conexiones duraderas con los consumidores. Al hacer reír, las marcas pueden no solo captar la atención, sino también fomentar una relación emocional y facilitar el recuerdo de su mensaje.


 Sin embargo, es esencial que las marcas se mantengan atentas a las sensibilidades culturales y contextuales para asegurarse de que su humor sea inclusivo y positivo. En un panorama publicitario en constante cambio, el humor se presenta como una estrategia diferencial que puede contribuir al posicionamiento de una marca y apoyar significativamente a su éxito dentro del nicho de mercado.


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